Nora traicionó a Yato, quien ahora está a merced del “padre”, quien por cierto tiene la facultad y el poder de obligar a nuestro dios callejero a cumplir su voluntad. Después de un distanciamiento provocado por la decisión de Yato de alejarse de Iki, su desaparición le resulta inquietante a Hiyori y a Yukine, quienes resuelven buscarlo cuando... ¡un nuevo desafío se les presentan! ¿Lograrán superarlo y encontrar a Yato?